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Editorial

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Rev Hosp Clín Univ Chile 2017; 28: 3-4
Héctor Ugalde P.
Esta es la primera revista del año 2017 que llega a las manos de quienes quisieran leerla, en su versión impresa y digital, tras un largo y difícil año 2017. Iniciamos este año 2017 sin haber logrado publicar ninguna revista del año 2016 y con perspectivas muy inciertas acerca de la sustentabilidad real de ésta, nuestra Revista Hospital Clínico Universidad de Chile. Para evitar esta situación es que hemos intentado junto al equipo editorial modificar nuestro funcionamiento y reinsistir en nuestra misión básica fijada desde los inicios de esta publicación, que es ser una revista eminentemente de carácter docente, dirigida a mantener en los lectores la presencia de los diferentes ámbitos de la Medicina, así como educar a las generaciones jóvenes en formación y a los médicos externos que puedan acceder a ella. Para esto siempre nuestra intención ha sido publicar revisiones de temas de amplia relevancia y que impacten en no solo una especialidad, sino más bien en el más amplio espectro de lo que es la Medicina. Además de estas revisiones nos ha interesado publicar casos clínicos de patologías que ojalá nos recuerden enfermedades que debiéramos tener presentes en nuestra mente, aunque no afecten directamente nuestro trabajo diario. Un buen ejemplo de ello son los casos que en este ejemplar se publican; por mencionar uno, el compromiso ocular de la enfermedad por arañazo de gato, que como podremos leer, diagnosticado a tiempo puede salvar un problema grave. ¿Quién no está expuesto a esta patología? ¿Quién debe olvidarla completamente? Si nos respondemos esta pregunta, veremos la real relevancia de publicar estos casos que probablemente no tengan acceso a otro lugar de publicación, dado lo aparentemente simple que resultan. Otro ejemplo, el caso de osteomielitis vertebral por Candida: una paciente estuvo 6 meses sintomática hasta que se logró su diagnóstico y tratamiento. ¿No es conveniente conocer estos casos? Y quizás así, una próxima vez que alguien consulte por síntomas parecidos, pensaremos en las excepciones y diagnosticaremos más precozmente una patología, tratable y curable. En fin, ejemplos hay muchos, pero lamentablemente está generalizado el concepto de que una revista sin indexación no vale y que no tiene sentido publicar allí: palabras escuchadas muchas veces y probablemente, pensadas más aun. Son pensamientos que reflejan el no entender el por qué de la existencia de esta Revista, la cual no pretende estar indexada, nunca lo ha hecho y probablemente nunca lo hará dadas sus características. Y esto, por supuesto, para muchos miembros de nuestro Hospital significa que no existe. Le escribo a esos miembros de este Hospital universitario: uno de nuestros objetivos centrales es la docencia y otro, la extensión. ¿No les parece bien tener un instrumento económico, visible, que llega probablemente a muchas más personas que a las cuales puedan llegar ustedes, a algunas que no tienen idea probablemente de su existencia y que tal vez, no les interese tampoco tener idea de ustedes? Con este instrumento, ustedes, docentes de este hospital universitario, pueden educar a muchos acerca de lo que ustedes mismos consideren relevante dentro de sus especialidades, relevante para el médico general, para el estudiante, incluso el estudiante de sus especialidades. Cierto es que no estamos indexados, pero, por favor, ese no es único valor de la existencia. Entre todos (qué amplio y qué poco real) podemos hacer de esta Revista un aporte no solo para los miembros de este Hospital, sino para los médicos de Chile. 


Luego de este largo comentario, paso a resumir los cambios que hemos introducido (que ya han sido destacados en alguna editorial previa) y los resultados hasta ahora conseguidos. Se modificó el Comité Editorial, reduciéndose a solo 7 miembros, todos del comité anterior. Y se formó un Comité Científico compuesto con uno o dos miembros de cada Departamento del Hospital, con excepción del Departamento de Otorrinolaringología que declinó a participar. A estos miembros se les encargó conseguir una publicación anual por Departamento y además ayudar a conseguir revisores de los trabajos que fueren llegando dentro de los miembros de su claustro. Esto se hizo dada la situación crítica de la Revista al inicio de este año que al fin termina. ¿Qué se consiguió? Se logró publicar las 4 revistas del 2016 dentro de este año, así como terminar la primera del 2017, la cual tienen en sus manos. Poco, parece, pero esto es lo que ocurrió. Para lograr estas 5 revistas en un año dependimos de los aportes de diferentes personas: alumnos, internos y médicos que decidieron enviar artículos, casos y algunas investigaciones. Hubo más periodicidad que en años anteriores y además los revisores hicieron su trabajo a tiempo, en la mayoría de los casos. Con excepción del Departamento de Obstetricia y Ginecología, aun no ha llegado ningún artículo proveniente del trabajo del Comité Científico, aunque promesas existen circulando. Por ahora, solo promesas. 

La situación, como se puede ver, sigue siendo crítica: tenemos 3 revistas del 2017 por publicar para iniciar el 2018. Los responsables aun creemos y confiamos en los aportes pendientes para lograr remontar la situación temporal, así como continuar mejorando en el cumplimiento de la misión que nos hemos impuesto; misión que espero comprendan los que aun consideran que esta Revista no vale nada y -como algunos incluso se atreven a sugerir- que es mejor no enviar nada a publicar aquí... Está claro que tenemos que mejorar, la intención es ésta. Dependemos de la participación de ustedes, de que la mayor parte de ustedes sienta que esta Revista es parte de la imagen Hospital y que nos debemos a lo fundamental que existe en una Universidad: educar. Somos un instrumento de aquello y aquí tenemos un arma para hacerlo, probablemente con mucha más llegada que la que podamos conseguir con acciones individuales. 

Los esperamos.

Correspondencia:

Dr. Héctor Ugalde Prieto

Editor Revista HCUCH

[email protected]

562 2978 8355