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600 mujeres en Chile mueren al año por cáncer cervicouterino

El cáncer cervicouterino es una alteración celular que se origina en el epitelio del cuello del útero, de lenta y progresiva evolución. Se manifiesta inicialmente a través de lesiones precursoras que se suceden generalmente en etapas. Éste, impacta de manera importante a la población femenina, principalmente entre los 30 y 50 años.

“Este tipo de cáncer es un tema preocupante, ya que fue el cuarto cáncer más frecuente en mujeres a nivel mundial el año 2018, y en Chile se estableció como el tercer cáncer más frecuente en incidencia y sexto en mortalidad”, señala el ginecólogo de nuestro hospital Dr. Tomás Neumann.

Y agrega: “Este cáncer es generado por el Virus Papiloma Humano (VPH), un virus de trasmisión sexual que se contagia mediante las relaciones sexuales, incluyendo coito vaginal, penetración anal e incluso durante sexo oral. Cabe destacar que tanto hombres como mujeres pueden contagiarse y transmitirlo sin darse cuenta. En el caso de los hombres, puede producir cáncer de pene y ano. Además, el VPH puede causar cáncer de garganta” sostiene.

Los factores de riesgo asociados al desarrollo de cáncer cervicouterino principalmente son:

• Tabaquismo

• Inicio temprano de actividad sexual

• Múltiples parejas sexuales

• Historia personal de infecciones de transmisión sexual

En nuestro país, existe como prevención primaria las vacunas contra VPH que actualmente se administra en los colegios a los niños y niñas de 4to y 5to básico, pero además se encuentra disponible en distintos establecimientos, recomendable su administración hasta los 45 años.

Otra alternativa de prevención es la que se realiza de forma secundaria, donde se realiza un tamizaje del CaCU: que puede ser por citología (Papanicolau o PAP, por su sigla), detección de VPH, y la combinación de ambas o cotest.

¿Cuáles son las recomendaciones de tamizaje del cáncer cervicouterino? Nos cuenta la matrona Claudia Puigrredón:

• Mujeres entre 25 y 64 años: Se recomienda tamizaje con PAP cada 3 años.

• Mujeres entre 30 y 64 años: Se recomienda realizar tamizaje con detección de VPH y triage con PAP sólo o genotipificación VPH 16-18.

• Mujeres mayores de 64 años: Se recomienda suspender tamizaje siempre que cuenten con 3 PAP negativos consecutivos o 2 cotest negativos consecutivos dentro de los 10 años previos al término del tamizaje.

• Mujeres menores de 25 años PAP según criterio médico y antecedentes de la paciente (inicio de actividad sexual).

• Mujeres vacunadas: Se recomienda mantener las recomendaciones anteriores.

Por: Fernanda Farfán

Comunicaciones Corporativas HCUCH