Generalmente, los pacientes llegan referidos por médicos generales, internistas o cirujanos. Sin embargo existen algunos signos de alerta que debe tener presente para consultar:
- Baja de peso inexplicable
- Fiebre asociada a sudoración profusa (especialmente si es nocturna)
- Masa en algún sitio del organismo que va creciendo o que no desaparece
- Sangramiento o secreción no acostumbradas
- Dolor sin causa aparente
- Lunar nuevo o cambio de un lunar ya existente
- Herida que no sana
- Tos o ronquera persistente
- Cambio en los hábitos del intestino