correcto funcionamiento del sistema inmunitario: aquel que defiende al cuerpo de los invasores, como son los microbios o las células cancerosas, por ejemplo. Este sistema debe reconocer al extraño, movilizar sus fuerzas y atacar. Para ello nuestro cuerpo está capacitado para llevar a cabo una compleja red de procedimientos que producen una rápida respuesta inmune cuando es necesario.

En 1980, de la mano del Laboratorio de Inmunología, nace la Sección de Inmunología, VIH y Alergias, la cual infatigablemente ha crecido para colocarse a la vanguardia de los centros de inmunología del país, cumpliendo una labor fundamental en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades alérgicas, autoinmunes e inmunodeficiencias, como el VIH.

Cuando una infección se vuelve frecuente y grave y no responde adecuadamente a los antibióticos, se sugiere la existencia de un problema del sistema inmune, por lo que hay que consultar al inmunólogo.

Condiciones como tener el virus del VIH que produce SIDA, no poseer bazo o un estado de desnutrición pueden afectar gravemente el equilibrio inmunológico, por lo que se recomienda consultar periódicamente o cuando su especialista lo indique.

Conozca también nuestro Centro de Alergias, ya que tratarse adecuadamente una reacción alérgica puede hacer la diferencia.