La psoriasis es una enfermedad cutánea que esta mediada por el sistema inmunológico y que tiene una prevalencia mundial del 2-3%. Hay registros de esta enfermedad desde el antiguo Egipto, y durante siglos fue confundida con enfermedades infecciosas como lepra.
La psoriasis es una condición que provoca una inflamación en la piel, con formación de escamas y enrojecimiento en distintos puntos del cuerpo. Puede ser localizada o generalizada, y puede estar confinada solo a la piel o expresarse en las articulaciones como artritis psoriática. Tambien durante muchos años, se consideró solo una enfermedad "cosmética", para la cual no existía cura ni tratamientos aceptables para disminuir la intensidad de las lesiones. Sin embargo, en los ultimos años ha existido una explosión de nuevas terapias que han ayudado a entender mejor las causas de esta condición, su evolución y han devuelto la calidad de vida de estos pacientes.
Como señala el Dr. Fernando Valenzuela, dermatólogo de nuestro hospital y experto en terapias biológicas de esta enfermedad: "Las lesiones que pueden ser múltiples y cambiar a lo largo de la vida, provocan la mayoría de las veces picazón, y con esto se generan lesiones de rascado y más psoriasis. La picazón también puede provocar alteraciones del sueño, irritabilidad y baja productividad. Por ende, el tratamiento de esta condición puede generar una mejoría global no solo en las lesiones, sino incluso en la empleabilidad. El paciente debe tener muy presente que la enfermedad se exarceba si la piel está muy seca o si recibe algún trauma, por lo tanto la hidratación de la piel es siempre mandatoria en estos pacientes. Además de los humectantes se puede utilizar corticoides tópicos u otros agentes que van a desinflamar la piel para evitar la aparición de lesiones clásicas de esta enfermedad".
La inflamación que se genera en la piel, es transportada a través de la sangre a múltiples órganos, lo que ocasiona que esta enfermedad tenga muchas condiciones asociadas, e incluso, puede disminuir la esperanza de vida de las personas que lo padecen. Está demostrado como estas moléculas inflamatorias provocan otras condiciones como hipertensión arterial, diabetes, alteraciones del colesterol entre otras. Incluso, agunos pacientes tambien experimentan alteraciones intestinales, oculares y renales. Esto es muy relevante, toda vez que las etapas iniciales de estas patologías son asintomáticas, por lo que solo la búsqueda activa a través de la entrevista médica y posibles exámenes según el caso, pueden detectar anormalidades iniciales, y muchas de ellas, se pueden revertir.
Las alteraciones articulares son muy frecuentes (1 de cada 3 personas con psoriasis la pueden tener) y provocan dolor, aumento de volumen y deformación articular en los pacientes. Puede ser una enfermedad muy invalidante y se requiere un manejo precoz para evitar deformidades e invalidez permanente.
"La alteración emocional es muy relevante en todos los pacientes. El tener una patología con lesiones visibles provoca síntomas de depresión y ansiedad. Muchos pacientes tienen lesiones en sitios visibles como cara y manos, lo que además puede provocar discriminación de sus pares o de la población general, lo que aumenta aún más los síntomas depresivos. Lamentablemente, algunos pacientes han tenido alteraciones tan importantes que lo han llevado a pensamientos suicidas, sobretodo en la adolescencia. Por ello, la comunidad debe conocer esta enfermedad, comprender que no es contagiosa y que por ende, no hay riesgo de vivir o estar cerca de estos pacientes, y sobretodo ofrecer comprension y acompañamiento más que aversión. También para los pacientes, educación en que síntomas pueden implicar enfermedad y riesgo" señala el especialista.
Los tratamientos son múltiples, deben ser indicados y seguidos por su médico tratante. Muchos pacientes requieren solo medidas generales y terapia en cremas, otros requieren terapias orales o fototerapia, y algunos requieren terapias biológicas. Se pueden combinar terapias para lograr el mayor beneficio terapéutico. A pesar que no podemos curar la enfermedad, estos tratamientos minimizan los síntomas, las lesiones de piel, y algunos además ayudan con las enfermedades asociadas.
Por último, esta patología heredable y crónica, puede ser manejada, por lo que los pacientes deben solicitar control y seguimiento médico. Pero es tarea de la comunidad también, el acogerlos e integrarlos durante su vida con el fin de maximizar su calidad de vida.
Durante el verano, el sol, la playa y descansar benefician la enfermedad, y es lo que conocemos como balneareoterapia. Es importante que la exposición solar sea controlada porque hay que evitar las quemaduras solares. Para ello, la exposición debe ser paulatina, comenzando por períodos muy cortos y lentamente aumentar los minutos. Relajarse también es muy importante en esta patología, incluso practicar algún deporte, yoga, meditación o actividades similares tienen beneficios comprobados.