logo HCUCH
HCUCH

Recomendaciones para el bienestar biopsicosocial en pandemia

Los efectos e impacto en salud mental en un contexto de pandemia afectan profundamente el bienestar biopsicosocial de cada persona. Es así como el miedo, la ansiedad, las preocupaciones e incertidumbre que surgen frente a las amenazas de la propia vida y la de los demás, se transforman en este momento en un importante foco de atención, comenta el psicólogo César Lillo especialista de la Unidad de Tratamiento del Dolor del Servicio de Medicina Física.

Por ello, el poder desarrollar y cultivar la capacidad de autocuidado o de higiene mental y emocional, se transforma en algo primordial y, tal vez, en algo casi de primera necesidad para mantener un estado de salud física y mental adecuado.

Recomendaciones de herramientas básicas y simples de autocuidado:

 Mantener horarios regulares para acostarse y levantarse. Implementar una rutina cada día de la semana para promover el buen dormir, evitando el exceso de estímulos (tv, celular, trabajo).

 Aunque no vaya a salir de su casa, quitarse el pijama o la ropa de dormir. Esto sirve para evitar la sensación de continuidad y poder organizar los ciclos del día.

 Promueva estilos de vida saludable con realización de rutina de ejercicios y alimentación saludable. Se sugiere evitar el consumo de alcohol, tabaco, té y cafeína, incluyendo bebidas cola, 6 horas antes de dormir. No automedicarse.

 No sobreexponerse a noticias estresantes; un flujo casi constante de noticias puede llevar a que una persona se sienta ansiosa o angustiada. Busque actualizaciones de la información a ciertas horas del día, procedente de sitios de información confiables.

 Mantenga sus redes de relaciones sociales. Incluso en las situaciones de confinamiento, trate en lo posible de mantener sus rutinas personales diarias o cree otras nuevas. Puede seguir conectado por medio del correo electrónico, redes sociales, videoconferencias y teléfono.

 Active sus contactos sociales para que de ser necesario, le brinden asistencia. Esté preparado y sepa de antemano dónde y cómo obtener ayuda práctica si la necesita. Asegúrese de tener al menos dos semanas de toda la medicación regular que pueda necesitar.

 Ser considerado con uno mismo y con los demás, ya que los sentimientos de incertidumbre y ansiedad también le ocurre a los demás, por lo tanto, intentar ejercitar la tolerancia con nosotros mismos y con los demás.

 Si vive en espacios reducidos y en familia, no los sobreexija con tareas.

 Buscar ayuda adicional, en el caso de estar muy nervioso, triste, ansioso o que la situación afecta alguna esfera de su vida de una manera que siente que no la puede manejar. En este caso es preferible recibir la evaluación por un profesional de salud mental con la finalidad de encontrar modos constructivos en manejar la adversidad.