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AudioBrain: detectando el deterioro cognitivo antes de tiempo

El Alzheimer y la demencia son dos trastornos que afectan la salud cognitiva en personas mayores y, aunque aún no tienen cura, los avances en tratamientos ofrecen nuevas esperanzas. ¿Podría mejorar el pronóstico si detectáramos su riesgo de aparición a tiempo? La detección temprana se perfila como un factor clave, abriendo las puertas a intervenciones más eficaces.

El innovador proyecto titulado “AudioBrain: software para el cribado de adultos en riesgo de deterioro cognitivo” promete transformar la forma en que se evalúa el riesgo de adquirir enfermedades cognitivas, aprovechando una medición rápida y no invasiva: las emisiones otoacústicas. La investigación es liderada por el doctor Gonzalo Farías, neurólogo del Hospital Clínico e investigador del Centro de Investigación Clínica Avanzada (CICA). Gracias a su innovadora propuesta, AudioBrain recientemente se adjudicó el fondo del Concurso Validación Tecnológica 2024 (CVTUCH 2024), otorgado por la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile, a través de la Dirección de Innovación, el Proyecto InES I+D y el Programa Ciencia 2030.

Este software fue desarrollado por un equipo multidisciplinario, compuesto por investigadores en neurología, otorrinolaringología, neuropsicología e ingeniería de la Universidad de Chile, dentro de los que se encuentran los Dres. Paul Délano, Carolina Delgado, Cristina de Gatica, Ximena García, Vicente Medel, Carlos Navarro y Mauricio Cerda. El trabajo se ha realizado en colaboración con la Corporación Alzheimer Chile.

Audición y deterioro cognitivo: una relación creciente

La relación entre la pérdida de audición y el riesgo de deterioro cognitivo ha sido ampliamente investigada a nivel mundial: “En los últimos años, se ha generado abundante evidencia que vincula la pérdida auditiva con un mayor riesgo de demencia. De hecho, se reconoce como uno de los principales factores de riesgo para desarrollar demencia en la adultez mayor”, señaló el doctor Gonzalo Farías.

El proyecto nació del interés genuino por explorar esta conexión: “Nuestro equipo comenzó a evaluar a pacientes mayores, midiendo tanto su audición como su desempeño cognitivo. A partir de esos datos, identificamos que una de las variables auditivas más comunes, las emisiones otoacústicas, aparecía constantemente alterada en los pacientes con mayor daño”, explicó el académico. Por esta razón, el equipo de AudioBrain decidió evaluar las emisiones otoacústicas en adultos mayores para ampliar las herramientas diagnósticas disponibles: “Esta metodología usualmente no se usa en la población mayor, pero vimos su potencial para ofrecer información adicional sobre la relación entre la salud auditiva y la cognitiva”, resaltó el profesor Gonzalo Farías.

La investigación inicial fue financiada por un proyecto de Anid adjudicado en 2020 y titulado “Test audiológico detecta en forma precoz la presencia de deterioro cognitivo en adultos mayores”. “Durante ese Fondef, trabajamos con información obtenida de más de 200 voluntarios. Lo que hicimos fue tomar esta señal de sonido y procesarla para identificar los elementos más relevantes que permiten predecir el riesgo”, declaró el académico. Para lograr esto, se compararon los datos recopilados de los voluntarios con bases de datos nacionales e internacionales, tomando como referencia la normalidad auditiva en sujetos sanos.

El resultado fue un algoritmo que procesa la señal de una forma que actualmente se encuentra protegida por derechos de propiedad intelectual del proyecto: “Nuestro equipo colaboró con ingenieros para desarrollar un software capaz de analizar los datos obtenidos. Gracias a este avance, descubrimos que las emisiones otoacústicas están relacionadas con el envejecimiento cerebral. Al examinarlas, es posible predecir el deterioro de la memoria o la aparición de atrofia cerebral”, explicó el doctor.

Emisiones otoacústicas: utilizando una prueba que ya existe

De acuerdo a la biblioteca virtual Síntesis de Conocimientos del Departamento de Educación en Ciencias de la Salud de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, las emisiones otoacústicas corresponden a un sonido generado por las células ciliadas de la cóclea que reaccionan, contrayéndose en respuesta a estímulos sonoros externos. Estas emisiones viajan de regreso hacia el oído externo, donde se registran con un micrófono, permitiendo evaluar la función auditiva de manera detallada.

La prueba de emisiones otacústicas es objetiva, rápida y precisa, y actualmente se utiliza para detectar posibles problemas auditivos en recién nacidos. El examen consiste en insertar un pequeño dispositivo en el canal auditivo, bastante similar a los termómetros digitales de oído: “Este aparato tiene una especie de audífono con forma de oliva que se inserta en el conducto auditivo y produce un sonido, para luego registrar con un micrófono la respuesta que se genera desde el oído del paciente”, explicó el doctor Farías e indica: “A diferencia de la audiometría —que es la prueba que se usa habitualmente en adultos—, el examen de emisiones otoacústicas no requiere una sala insonorizada, personal especializado ni la colaboración constante del paciente, lo que reduce la subjetividad del examen”.

El aparato utilizado para el examen es de uso clínico común y está disponible en la gran mayoría de los centros asistenciales del país: “Lo que nosotros aportamos, más allá del dispositivo y del hardware que ya existe, es un software que procesa la información obtenida con la prueba de emisiones otoacústicas y proporciona un resultado que indica el riesgo de que la persona padezca deterioro cognitivo o daño cerebral relacionado con la edad”, argumentó el académico.

El proyecto actual

Con los fondos otorgados por el CVTUCH 2024, el proyecto se encuentra en etapa de desarrollo. “Hasta ahora, nuestro software ha sido aplicado de forma piloto y hemos notado que, en ocasiones, la información que entrega la prueba, es decir, el predictor de riesgo, no se comprende completamente, lo que dificulta la interpretación de los resultados por parte del personal de salud”, señaló el doctor Gonzalo Farías.

En ese contexto, “el objetivo de este financiamiento es realizar pruebas en terreno con personal de salud que utilice el software, evalúe la tecnología y aporte sugerencias para su mejora”, explicó el académico. “Eventualmente, aplicaremos estas mejoras para que la herramienta final sea lo más utilizable y optimizada posible para su uso en entornos de atención ambulatoria”, agregó.

Estas evaluaciones en terreno se están realizando en el Hospital Clínico y en la Corporación Alzheimer Chile: “En general, los pacientes atendidos son adultos mayores de 50 años, ya que a partir de esa edad, las personas muestran mayor interés en realizar este tipo de mediciones para detectar de forma temprana, si tienen riesgo de presentar problemas cognitivos o cerebrales en el futuro”.

El sentido de la investigación

El Dr. Farías explicó: “Nuestro objetivo final es generar una herramienta que pueda ser instalada, aplicada y utilizada en los sistemas de salud, para así influir directamente en el bienestar de las personas. Queremos transferir esta tecnología a la sociedad, no solo quedarnos con el conocimiento”.

Los próximos pasos para AudioBrain incluyen “evaluar la tecnología en Atención Primaria, en un entorno ambulatorio, para probar su desempeño y analizar la aceptación, tanto de los profesionales de salud como de los pacientes. También nos interesa conocer la opinión de los usuarios sobre la aplicación de esta tecnología, con el fin de desarrollar un software listo para su distribución y uso en ambientes clínicos”, puntualizó el doctor Farías.

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Por: Comunicaciones Institucionales, Facultad de Medicina, U. de Chile