Transformando a los médicos de la Atención Primaria en agentes centrales del enfrentamiento de enfermedades hepáticas
“En Chile, las enfermedades hepáticas crónicas son una de las principales causas de muerte, pero suelen diagnosticarse en etapas avanzadas cuando el daño al hígado ya es severo”, explica el Dr. Nicolás Ortiz
“En Chile, las enfermedades hepáticas crónicas son una de las principales causas de muerte, pero suelen diagnosticarse en etapas avanzadas cuando el daño al hígado ya es severo”. Así explica el Dr. Nicolás Ortiz, residente de Medicina Interna de nuestro Hospital, el aporte que releva su reciente publicación, titulada “Una aproximación general al diagnóstico y manejo del daño hepático crónico en la Atención Primaria de Salud”. Esta revisión de la literatura busca que los médicos que trabajan en la Atención Primaria de Salud (APS) tengan herramientas para poder identificar tempranamente las enfermedades hepáticas crónicas con exámenes de alta disponibilidad, como exámenes de sangre o ecografía abdominal, por ejemplo.
“Un enfoque basado en la prevención y la detección temprana desde la APS no solo ayudaría a disminuir la carga sanitaria y los costos asociados de estas patologías, sino que también mejoraría significativamente la calidad de vida de los pacientes, reduciendo el impacto de éstas en el país”, agrega. Su artículo ha sido publicado en la Revista Médica de Chile y apunta a que los consultorios y centros de salud familiar podrían convertirse en la primera línea de defensa contra las enfermedades hepáticas para evitar las complicaciones graves, como lo son el cáncer de hígado o la insuficiencia hepática.
El Dr. Ortiz hace ver que una de las limitaciones que tiene el APS para el manejo de las enfermedades hepáticas es que estas no forman parte de ningún programa formal de tratamiento, como sí lo son otras patologías que son GES. No existen guías del Minsal ni estandarización respecto a su manejo ni incentivos o metas para pesquisa temprana en APS.
“Las enfermedades hepáticas crónicas, como la enfermedad hepática esteatósica asociada a disfunción metabólica (conocida comúnmente como hígado graso metabólico) y la enfermedad hepática relacionada con el alcohol, entre otras, dañan progresivamente al hígado y muchas veces no presentan síntomas sino hasta en etapas avanzadas”. Es por esta razón que su trabajo ofrece herramientas prácticas a los médicos generales para que puedan identificar dichas patologías en forma temprana. Nos explica que “por ejemplo, hay pruebas que están disponibles en la APS y que se pueden solicitar, como el perfil hepático o hemograma, ya que en base a esos dos se puede calcular automáticamente el FIB4 (índice que ayuda a determinar la cantidad de fibrosis en el hígado). Esta forma de tamizaje es rápida y usa las herramientas que ya tenemos”. Así también los autores proponen instrumentos para saber cómo interpretar los resultados y cuándo derivar a los pacientes a un especialista. “En el artículo también enfatizamos la importancia de la prevención, mediante medidas como mantener un peso saludable, seguir una alimentación equilibrada, realizar ejercicio y suspender o reducir el consumo de alcohol”, añade.
Este trabajo forma parte de la línea de investigación de enfermedad hepática esteatóstica asociada a disfunción metabólica, desarrollada fuertemente en la Sección de Gastroenterología del Hospital. “Y este artículo, en particular, intenta expandir la línea de investigación en la búsqueda del fortalecimiento de la prevención y el manejo temprano de enfermedades hepáticas, así como de mejorar la integración de la Atención Primaria con los especialistas, fomentando el uso de herramientas no invasivas y la modificación de factores de riesgo”, agrega el doctor.
El equipo de trabajo estuvo conformado por Nicolás Ortiz y Larissa Aleman, médicos en formación como internistas y, además, doctores en Ciencias Médicas; los Dres. Juan Pablo Roblero, Álvaro Urzúa, Máximo Cattaneo y Jaime Poniachik del equipo de Hepatología del HCUCH y la Dra. Sofía Ponce, médica de la Universidad de Chile que actualmente trabaja en APS como parte de su Programa de Destinación y Formación. “Esta colaboración interdisciplinaria fue fundamental para asegurar un enfoque práctico y alineado con las realidades de la APS”, finaliza el Dr. Ortiz.