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PULPITIS

La pulpitis es la inflamación de la pulpa dentaria que es el tejido que se encuentra en el interior de los dientes (nervios, vasos sanguíneos y células especializadas, entre otros). Esta inflamación puede ser más o menos dolorosa dependiendo del tipo de pulpitis que sea y se estimula a través del frío, del calor o del tacto. Se produce principalmente por caries dentarias no tratadas, pero también por periodontitis, bruxismo, sobrecarga oclusal (mordida), traumatismo de la pieza, reseción de las encías por cepillado traumático.

Se clasifica en pulpitis reversible o irreversible. La reversible se caracteriza por producir dolor no localizado, agudo y que cede después de aplicar un estímulo doloroso. En cambio, la irreversible, por la aparición de dolor de forma espontánea y sin haber aplicado ningún estímulo sobre el diente. Si se ha producido pus dentro de la pulpa, estamos en presencia de una infección, por lo que la aplicación de frío o calor puede variar la sensación del dolor.

AUTOCUIDADO

Se debe acudir al dentista a lo menos cada 6 meses. Si la pulpitis no es atendida, el tejido pulpar eventualmente muere.

CUÁNDO ACUDIR AL ESPECIALISTA

Para prevenir caries hay que realizarse controles anuales. En caso de traumatismo, acudir al dentista. En caso de dolor espontaneo sin explicación, también hay que acudir inmediatamente a control.

EXÁMENES

Dependiendo de la causa, lo primero es un examen clínico con pruebas de calor y frío. Se le solicitarán radiografías según el caso.