El balón intragástrico ingerible es una herramienta más en el tratamiento del sobrepeso y la obesidad, cuya principal ventaja frente al tradicional balón intragástrico es que no requiere de anestesia, pabellón ni endoscopía para su instalación.

Este innovador dispositivo se coloca a través de la deglución de una cápsula pequeña que contiene el balón y que está conectada a un pequeño catéter. Según explica el Dr. Enrique Lanzarini, cirujano digestivo del Hospital Clínico Universidad de Chile, “el paciente traga el dispositivo y una vez que está en el estómago se rellena con una solución especial.  Al ocupar volumen en dicha zona se favorece el tratamiento multidisciplinario de la obesidad o el sobrepeso, ya que genera una saciedad precoz al momento de alimentarse”.

Y prosigue el cirujano, “el paciente es atendido en forma ambulatoria, no requiere hospitalización y el procedimiento se lleva a cabo a través de un control radiológico”.

¿Qué tan efectiva es la baja de peso?

“La baja de peso que se produce con este balón intragástrico va entre 10 a 15 kilos, lo que equivale al 10 o 15% del peso total de una persona”.

¿Para quiénes está indicado?

 “El balón está indicado para personas con obesidad, es decir,  con índice de masa corporal (IMC) mayor a  30 y también para personas que tienen sobrepeso, o sea, con IMC entre 27 a 30”.

Es muy importante considerar que la instalación del balón no es suficiente para el manejo de la obesidad o el sobrepeso, como indica el Dr. Lanzarini, “el balón intragástrico ingerible es una herramienta para el tratamiento del sobrepeso o la obesidad y siempre debe abordarse en el contexto de un manejo multidisciplinario, donde el cambio de estilo de vida, las pautas de alimentación, el manejo psicológico, el ejercicio, la kinesioterapia son factores muy relevantes para el manejo efectivo de esta enfermedad”.

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