Estrategias de autocuidado para trabajadores de la salud
El equipo del PASE nos entrega estos consejos que son los EPP para cuidar nuestra salud emocional durante este tiempo de pandemia. Se implementan en 4 momentos:
Preparación para el turno
Le aconsejamos planificar pocas tareas para el día antes del turno para así tener una jornada tranquila.
Cuide su sueño y alimentación, y en lo posible tratar de hacer ejercicio.
Conéctese con sus seres queridos. Haga cosas que disfrute. Regalonéese para fijar eso en la mente como un “cargarse de energía positiva”.
Busque algún objeto o fotografía para tener en el hospital como amuleto emocional y que nos conecte con las cosas buenas y valiosas de nuestra vida. Tenerlo a mano para poder recurrir a él en los momentos difíciles.
Pausa activa:
Es importante parar 5 minutos cada 60 (o mínimo 5 cada 90 minutos) para estirarse, respirar, mirar por la ventana, ir al baño, hidratarse, etc.
Respiración:
Respiramos conscientemente para manejar la tensión emocional y ansiedad, y para apagar el sistema de alarma del cerebro.
Ponerse en posición cómoda con pies en el suelo.
Respiración diafragmática en 4 tiempos.
Inhale…2…3…4…. Exhale...2…3...4…. Sostenga...2…3...4.
Experiencia sensorial intensa cuando hay mucha ansiedad o angustia, debemos cambiar de foco de experiencia emocional a experiencia sensorial:
Meter codos en agua fría
Lavarse la cara con agua fría y/o mojarse el pelo
Comer algo dulce
Apoyarse en los compañeros: pedir apoyo, si se necesita.
Recuperarse del turno es un proceso activo, no es solo “soltar”. Debe cuidar el sueño del posturno. Es vital usar los antídotos contra el estrés: conectarse con la naturaleza, realizar alguna actividad artística (música, pintura, escribir, danza, etc.), vincularse con sus seres emocionales como los niños o mascotas y compartir un tiempo de juego, regalonearse con algo: prepárese algo rico y dése un gusto con algo sano.
Medidas para todo este tiempo de crisis
Ajuste de expectativas: no somos perfectos, no podemos llegar a todas. A pesar de lo que hagamos, igualmente los pacientes se van a complicar y algunos van a fallecer. No somos superhéroes, tenemos limitaciones y debemos cuidarnos.
Saber qué es normal: sentir miedo, angustia o cansancio es lo esperable. Sería raro no tener estas experiencias en la situación en que estamos.
Pedir ayuda, si la necesita: si uno pierde el equilibrio, recurre a afirmarse. Eso es lo sabio a hacer. Busquemos apoyo, si lo necesitamos especialmente en circunstancias como éstas en que vamos a tener que “sostenernos emocionalmente” y sostener a nuestros compañeros y nuestros pacientes.
Mantener contacto cercano con seres queridos: llámelos con frecuencia y exprese lo que siente.
Cuidar a mis compañeros de trabajo: facilitemos el cuidado mutuo.