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Dres. Robles y Morales publican resultados de su estudio sobre isquemia mesentérica aguda

 “Es importante la labor académica y mostrar los trabajos que hacemos, presentarlos en congresos y culminar el ciclo con su publicación. Al publicar en revistas internacionales ponemos a Chile en el mapa con resultados a nivel de los estándares internacionales”, apunta el Dr. Robles.

La denominada isquemia mesentérica aguda (IMA) es una emergencia quirúrgica grave que, a pesar de su baja incidencia, tiene alta mortalidad. Básicamente consiste en una falla de la perfusión en cumplir los requerimientos metabólicos basales de los órganos viscerales abdominales secundario a una interrupción abrupta del flujo sanguíneo mesentérico por una oclusión (deja de pasar sangre por el vaso sanguíneo) o estenosis (estrechamiento) de las arterias o venas viscerales del abdomen, quedando con compromiso isquémico variable, el que puede comprometer con mayor frecuencia al intestino delgado o grueso, y en menor medida a otros órganos intraabdominales como el hígado, estómago, páncreas, etc. La IMA generalmente es del lado arterial, pero también existe del lado venoso, su incidencia va en aumento con una morbimortalidad elevada”. Comenta además el cirujano vascular, José Matías Robles, que a pesar de que algunos pacientes se salvan, éstos tienen sobrevida disminuida, producto de esta enfermedad y de las enfermedades asociadas.

Existen principalmente dos etiologías de la IMA arterial: trombótica y embólica. La isquemia de origen trombótico es el paciente con enfermedad cardiovascular conocida: el hipertenso, diabético, fumador o con enfermedad crónica arterial. La etiología embólica no presenta estos problemas, pero que, por ejemplo, hace una arritmia cardíaca y por ello genera un émbolo que viaja por la aorta y que puede ocluir una arteria visceral abdominal. “El paciente llega a Urgencia con un cuadro grave de abdomen agudo, de rápida instalación y que es tiempo-dependiente. Hay que tener un índice de sospecha alto en estos casos, a mayor tiempo que pase el paciente en la Urgencia, el pronóstico es peor, ya que lo que requiere es un tratamiento inmediato, que consiste en la reanimación y la cirugía en la gran mayoría de los casos”, asevera el Dr. Robles.

Un equipo dirigido por los Dres. José Matías Robles, del equipo de Cirugía Vascular de nuestro Hospital, y Álvaro Morales, residente del programa de Cirugía General de tercer año, realizó un análisis de los factores perioperatorios, detalles operatorios, mortalidad a 30 días y estancia hospitalaria, entre otros, de pacientes intervenidos de urgencia por isquemia mesentérica aguda entre los años 2016 y 2021 en nuestro Hospital. El trabajo fue presentado el año pasado en el Congreso Vascular Annual Meeting de la SVS Society for Vascular Surgery, realizado en Maryland, EEUU (primer trabajo chileno presentado en este congreso) y posteriormente el equipo culminó la tarea satisfactoriamente al publicar su estudio ”Experiencia y factores perioperatorios que afectan a los resultados en isquemia mesentérica aguda. Resultados de un hospital terciario chileno” en la Revista de Angiología de España del presente año, el cual ya ha tenido más de veinticinco mil descargas.

El Dr. Álvaro Morales, autor principal del estudio, comenta que en Chile muchos de estos casos se están pasando por alto porque en el país no contamos con redes de rápida derivación como las que tienen en otros países. “Los pacientes llegan a cirugía con muchas horas de evolución del cuadro, con el agravante de la no atención oportuna. Y a pesar de la demora en la derivación de los pacientes o en la logística de que efectivamente llegue éste a pabellón, la mortalidad vista en el Hospital fue de un 40% a 30 días. Esta es una tasa de mortalidad que se ciñe a los altos estándares internacionales registrados en la literatura. Esto habla muy bien del equipo de cirujanos, como del de nuestros colegas de la Unidad de Paciente Crítico, ya que mucho de lo que pasa con el paciente después de la operación depende del manejo del paciente crítico”. 

Otra conclusión a la que llegó el equipo fue respecto al tipo de pacientes encontrados, también en concordancia con lo que sucede en el resto del mundo, donde se ve un cambio en los factores de riesgo de morbimortalidad. “Hace unos años atrás más de la mitad de los casos de IMA correspondían a pacientes sin enfermedades cardiovasculares de base, que se origina de una fuente embólica, principalmente del corazón, es decir, tuvieron un coágulo ‘disparado desde el corazón’. Y vemos que cada vez más se observa una tendencia hacia una etiología trombótica, que son estos pacientes que conviven con varias enfermedades de la esfera cardiovascular. Observamos que esto empieza a tener más prevalencia dentro de los pacientes que consultan”, explica el Dr. Morales.

Los pacientes tratados tienen una larga hospitalización, entonces salen deteriorados y el pronóstico de sobrevida a años plazo tampoco es tan bueno. “Esta enfermedad puede traer secuelas funcionales porque generalmente hay resección intestinal, además, de tener una sobrevida disminuida. Está demostrado que hay muchas enfermedades de la esfera vascular y cardiovascular que disminuyen las expectativas de vida. Más que nada se habla de que estas enfermedades son de pronóstico sombrío”, concluye el especialista.

Los resultados de esta enfermedad no están bien informados en los países en desarrollo. Hay poca publicación de este tema a nivel internacional y nacional. “Quizás porque no ha habido un gran cambio en la cirugía con respecto a cambiar el pronóstico de esta enfermedad. A pesar de toda la tecnología endovascular, el pronóstico sigue siendo malo. Por otro lado, en cada centro es difícil encontrar la casuística de estos casos, porque generalmente algunos de estos pacientes llegan a la Urgencia, fallecen en la Urgencia o se operan por otros equipos. Más que nada lo que nosotros quisimos hacer es compararnos a nivel internacional. Es por eso que decidimos llevar este trabajo a un congreso vascular en EEUU”, explica el Dr. Robles.