Ambos programas fueron coordinados por el Departamento de Bienestar y Desarrollo Organizacional de la Subgerencia de Recursos Humanos. El profesor Peterson Saintard, especialista en Lingüística Aplicada en la Universidad Estatal de Haití, que se ha dedicado a la enseñanza del créole haitiano, francés e inglés con más de cinco años de experiencia en Chile comentó: “Solo quiero agradecerles por su dedicación y por asistir constantemente. Como ya se ha mencionado, más allá del idioma, lo más valioso ha sido el ambiente que ustedes han creado, el cual ha facilitado la construcción del conocimiento lingüístico. En especial, destaco el cruce de sus experiencias con diferentes personas. Agradezco su entrega, su esfuerzo y su compromiso por mejorar su trabajo y contacto con diversas personas. Me siento privilegiado de haber estado con ustedes y con todo el equipo que hizo posible este curso”.

Frente a ello, Rocío Fuentes, supervisora de cajas del Servicio Ambulatorio, agradeció al profesor Peterson Saintard: “La buena disposición que tuvo para enseñarnos siempre con una sonrisa. Fue muy agradable venir al curso con él y aprendimos mucho en el tiempo que estuvimos. En las sesiones conocimos las frases más habituales que nos ayudan a comunicarnos con nuestros pacientes actualmente. Fue una instancia muy enriquecedora de no solamente aprender, sino que también de conocer personas de otros servicios”.

Asimismo, Mical González, ejecutiva de nuestro Centro de Contactos, declaró: “El curso me gustó mucho, porque nos será de gran ayuda para atender a los pacientes que tienen dificultades para comunicarse, especialmente a quienes trabajamos directamente con ellos por vía telefónica para agendar horas. Muchas veces no se les entiende bien y gracias a este curso podremos comprender mejor lo que necesitan. Me encantó, realmente fue muy gratificante conocer a gente nueva y de diferentes culturas”.

En tanto, la profesora Milena Garrido, experta en lengua de señas, avanzó con la comunidad en comprender qué es la discapacidad auditiva, conocer su gramática y el uso de señas, expresar saludos básicos y comunicar información personal. "Muchas gracias, nunca me voy a olvidar de ustedes, y espero que ustedes tampoco se olviden nunca de la lengua de señas”, fueron las palabras con las que la profesora Milena dio inicio a la ceremonia de cierre del curso. “Recuerden que algunas señas se usan más y otras menos, y es importante seguir aumentando el conocimiento. Gracias por su participación y por asistir a todas las clases. Mostraron responsabilidad e interés en el objetivo de seguir aprendiendo y preocupación por las personas sordas. Estoy feliz y muy emocionada de haberles dado esta herramienta para que puedan comunicarse. Realmente, muchas gracias a todos ustedes por participar y por su gran interés".

Este curso no solamente fue una oportunidad para aprender, sino también para conectar con funcionarios de diversos servicios. Así lo expresa Rayen Nuñez, admisionista: "Quiero agradecer a Milena por compartir su conocimiento con nosotros. Ha sido una gran herramienta, especialmente para quienes trabajamos en el servicio ambulatorio. Fue una experiencia muy gratificante para mí, y creo que para el grupo también, ya que fue muy cómodo trabajar con personas de otros servicios y conocerlos, además de adquirir un nuevo aprendizaje. En lo personal, ha sido un espacio muy satisfactorio y creo que todos lo pensamos así. Solo quiero agradecer; ha sido una herramienta realmente valiosa".

Por su parte, Priscila Robles, cajera admisionista, evaluó positivamente el cierre del curso, afirmando que “se unieron diferentes secciones del Hospital, lo que me parece súper importante porque todos somos parte de algo y compartimos un objetivo común: los pacientes. La comunicación con todos es lo que realmente vale. Agradezco porque esto se trata de no tener enemistad con ninguna área, sino de ayudarnos y acompañarnos siempre para avanzar y no retroceder. Estoy feliz de haber compartido en este ámbito; me tocó un grupo excelente y estoy agradecida con la profesora, que fue un 7. Ojalá haya una segunda oportunidad para seguir aprendiendo".

Finalmente, Pía Rodriguez, enfermera de la Unidad de Pacientes Críticos, agregó: “Esto es fundamental para acercarnos a una comunidad y cultura que muchas veces desconocemos. Para ellos, saber que pueden llegar a un hospital donde las personas se interesan por cómo se comunican o por cómo piensan es invaluable. Que puedan recibir atención de calidad en su propia lengua es algo que debería estar dentro de las políticas de la institución, porque no se trata solamente de cómo se comunican, sino de cómo pueden acceder a la salud”.